En un movimiento que ha despertado comentarios en los círculos políticos de Casanare, la doctora Sandra Sánchez, prima de la senadora de la República Sonia Bernal, ha presentado su renuncia como directora regional del Departamento de Prosperidad Social (DPS), tras más de 20 meses en el cargo. Su gestión, considerada discreta por muchos, no ha logrado destacar en la opinión pública, pero su salida deja en evidencia el manejo político detrás de la entidad.
Fuentes cercanas señalan que este movimiento se interpreta como parte de un enroque político impulsado por la senadora Bernal.
La hoja de vida que se ha propuesto para reemplazar a Sánchez es la del exdiputado Osbaldo Cáceres, un hombre de confianza de Bernal, quien fue gerente de su campaña y se ha desempeñado como asesor principal en su Unidad de Trabajo Legislativo (UTL). Este nombramiento no solo garantizaría que la entidad continúe bajo la influencia de la senadora, sino que también acabaría con los rumores sobre una posible candidatura de Cáceres a la Cámara de Representantes en las próximas elecciones.
Con este movimiento, la senadora Bernal sigue consolidando su red política en la región, manteniendo bajo su control entidades clave.
El cambio en la dirección del DPS regional refuerza la idea de que las decisiones en esta entidad responden, en buena medida, a los intereses políticos de la senadora.
Aunque el nuevo nombramiento aún no ha sido oficializado, se espera que el exdiputado Osbaldo Cáceres asuma el cargo en las próximas semanas, continuando con la línea de influencia política que ha caracterizado la gestión de Bernal en Casanare.