«Con los crespos hechos» se quedaron los promotores de la revocatoria de mandato de la Alcaldesa de Aguazul, Johana Moreno, al recibir la notificación de la Registraduría Nacional del Estado Civil, que después de revisar las firmas aportadas para promover la votación de dicho proceso, encontraron que el número no era suficiente para su convocatoria.
Según la entidad, de los 3.645 registros (firmas) aportados por el Comité Promotor de Revocatoria para su revisión, apenas resultaron válidos 1.951, número claramente inferior al mínimo de firmas válidas que se requerían para continuar con el proceso y que para este caso era de 3.021.
Entre las anomalías que se detectaron, se halló, por ejemplo: incorrecta inscripción en el censo electoral municipal, firmas con datos incompletos, registros repetidos, inconsistencias en nombre o datos personales del firmante, registros uniprocedentes (o sea varias firmas al parecer hechas por la misma persona), entre otras anomalías.
Por inconsistencia de firmas, esta revocatoria, junto con la de Orocué, se quedan «en el camino». Otra de ellas que se venía promoviendo hasta hace algunos meses y que se «apagó» luego de extrañas reuniones de algunos de sus promotores con el Alcalde, fue la de Maní, uno de cuyos animadores apareció en fotos asistiendo a varios encuentros con el mandatario local y luego como beneficiario del cumplimiento de «compromisos comunitarios».
Por ahora, parece que siguen avanzando las revocatorias contra el Alcalde de Monterrey y contra la alcaldesa de Paz de Ariporo.
