Mientras los esfuerzos a nivel mundial están enfocados en detener la propagación de la covid 19, y en el desarrollo de planes de inmunización frente a este nuevo coronavirus, otras enfermedades van creciendo de forma silenciosa convirtiéndose en una amenaza para la salud pública. Precisamente, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertó sobre el aumento de casos en patologías que antes estaban bajo control como la tuberculosis, el VIH y la malaria.
“Estamos aún en fase epidémica de algunas patologías que, con la pandemia por covid 19, hubieran podido tener un comportamiento descendiente. Sin embargo, encontramos que siguen aumentando y, por ejemplo, en el caso de VIH, lo más seguro es que haya un subregistro por la falta de tamización, a propósito del confinamiento en el que hemos estado”, dicen epidemiólogos que han adelantado estudio sobre la situación actual de salud del país.
Por otro lado, la preocupación aumenta cuando varias de esas patologías causadas por microorganismos, resultan ser intratables por la ineficacia de medicamentos o por lo que la comunidad científica denomina resistencia antimicrobiana (RAM), que pone en jaque a la salud.
A propósito, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que para el año 2050, la resistencia a los antibióticos será la principal causa de muerte en el planeta, por encima del cáncer. Agrega el organismo internacional que por lo menos habrá 10 millones de muertes cada año, es decir, un fallecimiento cada tres segundos, debido a la incapacidad de los fármacos para atacar bacterias, causantes de graves enfermedades antes controladas.
Enfermedades bacterianas del tracto respiratorio como la neumonía o la tuberculosis, que ataca principalmente los pulmones; así como también infecciones en vías urinarias y de transmisión sexual como la sífilis y la gonorrea, están llegando a ser un reto para la salud púbica por la dificultad para abordarlas con medicamentos, poco a poco, inservibles. De ahí que se hable de “superbacterias”, un termino acuñado por científicos para referirse a esos microorganismos que mutan para garantizar su supervivencia y sobrevivir al efecto de los antibióticos.
“El uso indiscriminado de medicamentos ha hecho más fuertes los microorganismos, los ha hecho sobrevivir y mutarse. Hay pacientes que incluso hospitalizados deben pasar hasta por seis clases de antibióticos en parte porque los microorganismos están adaptados. Ahí se incluyen las neumonías e infecciones de las vías urinarias”, añaden expertos.
¿Cuáles son las enfermedades silenciosas en Colombia?
El Ministerio de Salud y Protección Social ha sido enfático en que no se puede dar por terminada la emergencia sanitaria causada por el dengue, que comenzó en marzo de 2019. A pesar de que se redujo el número de casos, probablemente por el aislamiento obligatorio, Colombia es uno de los países más afectados por el dengue, con 67.395 personas contagiadas en lo corrido del 2020. El 70 % de las personas afectadas residen en Valle del Cauca, Cali, Huila, Tolima, Santander, Cundinamarca, Meta, Cesar, Antioquia, Caquetá y Córdoba.
La malaria, causada por un parasito transmitido a través de la picadura de un vector, está cerca de alcanzar los reportes por dengue. El INS revela que este año, 52.939 colombianos han sido diagnosticados con esta enfermedad, los hombres
encabezan el listado con el 58 % del total de casos registrados. En este caso, Chocó, Nariño y Norte de Santander con las regionales con mayor ocurrencia. Anualmente, según informe del Ministerio de Salud y Protección Social, a nivel nacional, entre 60 mil y 70 mil personas contraen malaria; lo que quiere decir, tal como lo alertó la OPS, que a pesar de las medidas impuestas para evitar la propagación de covid 19, la malaria continúa su curso como en cualquier periodo con o sin pandemia.
Vale la pena aclarar que, sobre estas enfermedades causadas por bacterias, en Colombia, según el Plan Nacional de Respuesta a la Resistencia a los Antimicrobianos, se ha encontrado que las fluoroquinolonas, una familia de antibióticos, dejó de ser una opción terapéutica para el tratamiento de infecciones urinarias, teniendo en cuenta que el porcentaje de resistencia ha alcanzado un 32 %. Así mismo, se ha encontrado que el tratamiento recomendado internacionalmente para enfermedades gastrointestinales, originadas por la bacteria E.Coli, no ha resultado efectivo.
Por otro lado, sobre enfermedades provocadas por virus, por encima de la influenza y el resfriado común, en Colombia el VIH sigue estando en el foco de la salud pública, “sin pandemia se esperaba tener por lo menos 8.473 casos diagnosticados con positividad; el registro va en 8.052 a pesar del confinamiento. Esto permite aducir que hay un subregistro bastante significativo y posiblemente muchos más casos que no se han podido tamizar debido a la pandemia. La clave está en la identificación temprana para el manejo médico de los usuarios”, concluyen expertos analistas clínicos.
Lo que recomiendan los expertos
Frente a enfermedades transmitidas por vectores, como el dengue o la malaria, se recomienda, a nivel comunitario, la disposición adecuada de residuos sólidos para evitar el criadero de mosquitos y otros insectos transmisores; no permitir el estancamiento de aguas, también tener en cuenta medidas de protección personal como el uso de repelente y no exponerse en zonas donde haya alta presencia de vectores.
Por otro lado, para el tratamiento de patologías bacterianas, hay que recurrir a los antibióticos solamente cuando sea estrictamente necesario y no automedicarse, pues esta es la principal razón, de acuerdo con la OMS, por la que el 50 % de estos medicamentos están siendo usados de forma inadecuada. Por lo tanto, aseguran que la ingesta de antibióticos debe darse solamente cuando sean formulados por un profesional de la salud, seguir las recomendaciones cuando sean prescritos, concluir adecuadamente el tratamiento e implementar acciones de autocuidado como el lavado de manos para prevenir infecciones causadas por microorganismos de tipo bacteriano.
En últimas, y no menos importante, se recomienda que las personas tengan completo su esquema de vacunación, evitando el contagio de enfermedades como hepatitis, tuberculosis, tosferina, difteria, influenza, entre otras.
Con respecto a infecciones bacterianas, los informes más recientes del Instituto Nacional de Salud (INS) revelan en donde hay que poner la lupa. De acuerdo con la entidad, la sífilis gestacional y la sífilis congénita, son complicaciones que han presentado una tendencia en crecimiento; este año van 5.643 casos y 688 respectivamente, lo que representa un incremento del 18.2 % y del 24.4 % en comparación con el año anterior.
“Esa cifra, a semana 36 reportada por el Instituto Nacional de Salud, nos revela que es muy importante la búsqueda activa de las gestantes para darles un tratamiento efectivo, evitando que se desarrolle una sífilis congénita”, puntualizan expertos.