El Gobierno del presidente Gustavo Petro se siente satisfecho, entregando una de sus tres grandes reformas sociales: una reforma laboral que es un triunfo del pueblo colombiano que durante décadas ha luchado por trabajo digno, con derechos y justicia social
En estos términos, el Ministro del Trabajo, Antonio Sanguino saludó la aprobación final en comisiones de conciliación de Cámara y Senado de uno de los textos clave del actual gobierno agregando que «recibimos con enorme alegría y satisfacción lo que acaba de acontecer”.
“Este agrado obedece a que por la vía del trámite parlamentario… de un debate álgido, candente, pero leal, le estamos entregando a los colombianos y colombianas, a los de ahora, los del futuro y a los no nacidos, una reforma laboral democrática, progresista en clave de derecho y de trabajo digno y decente”, agregó.
El titular de la cartera laboral sostuvo que el gobierno del presidente Gustavo Petro, quiere reconocer y agradecer por esta buena noticia “a los trabajadores, sectores populares y sociales que mantuvieron una permanente movilización en defensa y favor de esta reforma; así como a las bancadas que nos acompañaron, al presidente del Senado de la República, a los opositores, ponentes y conciliadores”.
En cuanto al compromiso con las microempresas el ministro Antonio Sanguino Páez, señaló: “vamos a seguir trabajando como está consignado en una de las preguntas de la consulta popular, en un programa que les permita tasas diferenciales en materia de crédito, incentivos tributarios, en tarifas de servicios públicos, apoyo técnico, formación y capacitación en inteligencia artificial”.
¿Qué trae la reforma laboral?
El trabajo nocturno será reconocido entre las 7:00 p. m. y las 6:00 a. m. con una jornada máxima de 8 horas diarias y 42 semanales.
Además, el recargo dominical y en día festivo aumentará al 100 % de forma gradual durante los próximos tres años.
Se pone fin a la tercerización para las madres comunitarias y trabajadoras del hogar, quienes serán vinculadas progresivamente a la planta del ICBF en condiciones dignas.
El contrato de los aprendices del SENA tendrá ahora carácter laboral, con un salario del 75 % del mínimo en etapa lectiva y del 100 % en etapa práctica. También contarán con afiliación a salud, pensión, ARL, primas y vacaciones.
Los transportadores de carga y pasajeros accederán a derechos fundamentales, con prioridad para su inclusión en el sistema de seguridad social.
Con la formulación de una política pública se garantizarán los derechos laborales del campesinado y del sector agropecuario.
Se implementará un programa de primer y último empleo, dirigido a jóvenes recién graduados y personas mayores que buscan reingresar al mercado laboral.
Las empresas que los contraten recibirán incentivos del Estado.
La formalización del trabajo de las personas manipuladoras de alimentos del programa PAE se hará de forma progresiva en cuatro fases, para garantizar el cumplimiento pleno de sus derechos laborales.
