Una resolución del Ministerio de Defensa llamó a calificar servicios a ocho altos oficiales del Ejército involucrados en casos de falsos positivos y otros delitos como la extorsión. Entre los oficiales que salen hay 4 coroneles.
El primero en la lista de oficiales retirados por la resolución es el teniente coronel Heber Naranjo, quien habría sido testigo contra el coronel Publio Hernán Mejía por crímenes cometidos en el batallón de La Popa, Valledupar.
El relato habría incluido detalles sobre los 14 militares que conformaron el grupo ‘Zarpazo’, quienes aparentemente cometían las muertes extrajudiciales.
Otro de los llamados a calificar servicio es el teniente coronel Gabriel Churio Marcucci, acusado formalmente por la Fiscalía por un caso de falsos positivos ocurrido en el año 2015 en Antioquia.
En resolución expedida por el MinDefensa también aparece el teniente coronel Miguel Antonio Beltrán, vinculado en la masacre perpetrada en 2006 en Vista Hermosa, Meta, donde murieron tres campesinos.
El mayor Jaime de Jesús Avendaño Ospina es otro de los retirados del servicio activo, estuvo en la cárcel por falsos positivos en el sur del Meta sobre hechos que se presentaron el 11 de noviembre de 2003.
El Mayor asignado a Casanare
El 12 de octubre de 2007 en Tauramena, Casanare, dos campesinos fueron presentados como guerrilleros y por este hecho fue vinculado el mayor Jorge Edwin Gordillo también retirado del Ejército en esta masiva salida de oficiales.
En enero de 2016 Un fiscal de la Dirección de Derechos Humanos Y Derecho Internacional Humanitario vinculó mediante indagatoria al coronel Marcolino Puerto Jiménez y al mayor Jorge Eduwin Gordillo Benítez, por el delito de homicidio en persona protegida, por hechos ocurridos el 12 de octubre de 2007 en Tauramena (Casanare).
Los militares son investigados en relación con los hechos cometidos por miembros del Batallón Ramón Nonato Pérez, en lo que presuntamente fueron falsamente presentados como muertos en combate Diego Armando Heredia Monroy y Domingo Antonio Castro Zorro. Según la investigación Heredia Monroy y Castro Zorro, fueron desaparecidos y reportados como muertos en combate el 12 de Junio de 2007, durante un combate, al parecer simulado, por tropas adscritas al Batallón de Infantería No.44 “Coronel Ramón Nonato Pérez” en la Vereda del Banco del Oso en Tauramena.
La lista de investigados la cierra el mayor Jarvin Marino Ungria, capturado por extorsionar a un comerciante en Cali cuando comandaba el Gaula Militar en la capital del Valle.