ARTÍCULO ESCRITO POR LA PERIODISTA Patricia Pino Cásseres

A mi mascota, amiga, compañera y guía, en su partida.
Mi Conchita…
Tú y yo supimos lo mucho que disfrutabamos estar juntos, no era un paseo matutino, era una compañía diaria que me ayudaba a no estar solo, a recorer las calles con pasos lentos, pero seguros, porque eras tú mi guía y mi fortaleza.
Poco se te escucharon tus ladridos, porque tú nobleza, ternura, paciencia, hablaba bien de tú comportamiento conmigo y con los demás.
Existieron personas que nos juzgaron, por nuestro vestuario o por mi condición o tal vez por cruzar la calle, sin previo aviso, aunque siempre hubo una mano amiga para orientarnos, pero siempre estuvimos juntos.
Algún día, los que te conocieron, te saludaron, te ofrecieron un trozo de comida, entienderan que no es un simple dolor que hoy tengo por tú partida, tú ausencia me va a marcar mis días, al saber que solo te tendré en mis recuerdos y no en mi regazo.
¡Me parte el alma, me divide en dos el corazón y me deja devastado!.
No es tan solo la parte física, que voy a extrañar de ti, sino la conexión inexplicable que juntos hicimos desde que llegaste a mi vida.
Mi Conchita, me harás tanta falta, como esa misma, cuando te llevaron de mi lado, se iba parte de mi andar, pero con la ayuda de Dios y la comunidad, volviste a mi lado, juramos no volvernos a separar, pero lo inevitable tendría que llegar.
Quédate tranquila, que cuando sea mi momento, estaré contigo y volveremos a recorrer los caminos de nubes, ya no ofreciendo, «lotería», sino disfrutando, de la felicidad que nos inunda, saber que fui tú papá, amigo, protector y tú mi fiel compañera.
Te amare por siempre y haré que mi camino, que no será el mismo sin ti, sea marcado por tus huellas, para que hablen y recuerden a es perrita maravillosa, amorosa e inteligente, que me acompaño por años y que hoy te fuiste sin avisar, a descansar en el tiempo del padre celestial al «Cielo canino».
Tú padre, amigo que desde el momento de tú partida, siente que te llevaste parte de mi… Jaimito