Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Diapositiva anterior
Diapositiva siguiente

LA DURA VIDA DE LA MUJER QUE FABRICA MATERAS EN CEMENTO Y PIEDRA PARA VIVIR

Ayúdanos a compartir la noticia

Para Luz Jeanny Castañeda la vida ha sido tan dura como las piedras y el cemento que usa para fabricar las materas con las cuales trata de sobrevivir.

Esta madre cabeza de hogar, con tres hijos (dos de los cuales sufren graves discapacidades), llegó a Casanare hace 20 años huyendo de la violencia de su natal Tuluá, de donde tuvo que huir para salvar la vida.

En un comienzo se radicó en Yopal, de donde se fue para Aguazul, a convivir con un hombre con quien conoció el amor y tuvo dos hijas (ahora de 13 y 17 años).

En esos comienzos, Luz Jeanny vio en el barrio La Campiña, en Yopal, a una mujer que convertía mezclas de piedra y cemento en materas.

EL DURO TESTIMONIO DE LUZ JEANIE.

Luego de tener a sus dos hijas, con el paso del tiempo, tuvo problemas y decidió separarse de su esposo.

Hace dos años, regresó a Tuluá, donde quedó embarazada de su tercer hijo, un varoncito que sufrió múltiples problemas al nacer y por un mal procedimiento a la hora del parto, quedó afectado por hipotonía muscular, situación que a sus dos años y medio de vida le impide caminar.

Sin embargo, decidió regresar a la casa de su primer esposo, en donde ha vivido un nuevo y duro episodio en su existencia.

“El papá de los niños constantemente vive echándome de la casa, y yo he tenido que aguantarme esta mala vida porque no tengo a donde ir”, refirió Jeanny.

Agrega que “la verdad ya no aguanto más, estoy aburrida y desesperada, quisiera salir, pero no puedo irme, no puedo llevar a mis hijos a sufrir conmigo, a aguantar lo que ya he vivido” dijo ella en tono nostálgico.

En medio de todas las circunstancias adversas y a raíz de la crisis económica que trajo consigo la pandemia, desarrolló un gran talento y comenzó a elaborar materas a base de piedra, arena y cemento, que, aunque le han permitido recibir algunos ingresos, comenta que la venta de las mismas no le da para el sustento de ella y de sus hijos.

“Yo fui a EXPOMUJER en Yopal, ahí en el Alcaraván, la Senadora me compró una matera, pero tuve que hacer una rifa de otra porque casi me quedo botada por allá, porque no me dio, no vendí las materas, y la empresa que me invitó me hospedó en un hotel por dos días, pero el domingo ya no tenía hospedaje, entonces realicé la rifa y gracias a Dios pude devolverme a las 11 de la noche a Aguazul”, dijo.

Por la difícil situación, Luz Jeanny pide a los mandatarios del departamento, que le colaboren con una vivienda y un trabajo con el que pueda darles estabilidad a sus tres hijos.

Además de ello, sigue en la búsqueda de recursos que permitan comprarle unos audífonos para María Paula, su segunda hija, quien tuvo problemas a la hora del nacimiento, y un caminador para su hijo menor.

Jeanny Castañeda se suma a la larga lista de personas que sufren por desplazamiento forzado, escasez de recursos, falta de oportunidades y necesidad de vivienda propia.

PUBLICIDAD

ENVÍANOS TUS INQUIETUDES, TU OPINIÓN ES MUY IMPORTANTE

CONTENIDO RELACIONADO