Allí, en Nunchía, la “Tierra del Duende”, a unos cuantos metros del parque principal se ubica la piedra de Bolívar, donde según la historia y la placa que reposa en el sitio, “el 26 de junio de 1819, el ejército libertador comandado por Bolívar, Santander, Anzoátegui, y los aguerridos llaneros en los que se encontraba Antonio Atanasio Barragán oriundo de Pore, Ramón Nonato Pérez natural de Trinidad, y los hermanos Celedonio y Rozo Sánchez, naturales de Morcote, vereda del municipio de Paya, iniciaron el ascenso para transmontar la cordillera y descender a las batallas definitivas del pantano de Vargas donde se selló la independencia de Colombia”.
Agustín Albarracín, líder cívico y dirigente comunitario del municipio de Nunchía continúa reclamando el reconocimiento a su territorio como uno de los escenarios por los que, hace más de 200 años pasó Simón Bolívar.
Dice que “en 2016 se conformó una comisión integrada por gobernadores de los cuatro departamentos: Casanare, Boyacá, Arauca y Cundinamarca, y se aprobaron recursos de la Ley Bicentenario para la puesta en marcha de proyectos, dentro de ellos la denominada ‘Ruta Libertadora’”.
En ella, tal y como lo afirma, hacen parte: Paz de Ariporo, Hato Corozal, Támara y Nunchía (en Casanare), sin embargo, a este último municipio, al igual que a Paya, Pisba y Morcote (en Boyacá) se les excluyó del Pacto Bicentenario firmado el 26 de junio de 2019.
“Queremos que el Gobierno Nacional nos compense porque es lo único que a este municipio aislado nos puede solventar para conectarnos con el centro del país», dijo el líder cívico.
Dentro del renombrado Pacto se anunció el mejoramiento de varias vías, entre ellas, arreglo de 54 km y construcción de la segunda calzada de la vía Zipaquirá – Barbosa; mejoras de 85 km, en la vía La Lejía – Saravena; intervención a 129 km en la vía Belén – Socha – Sácama – La Cabuya – Paz de Ariporo; mejoramiento de 29 km en Puerto Boyacá – Otanche – Chiquinquirá; reparación de 81 km entre Duitama – Charalá – San Gil; 41 km en la vía Sogamoso – El Crucero – Toquilla – Pajarito – Aguazul, y mejoramiento de la vía Vado Hondo – Labranzagrande – Yopal.
Según los habitantes de Nunchía, de allí salieron varios hombres que se unieron al ejército patriota.
“De este punto sale Santander con 1.200 soldados, y la vanguardia de Anzoátegui con 1.800, bajo el mando de Simón Bolívar. También recibe apoyo el ejército patriota por María Rosa Lazo de La Vega, heredera de la hacienda Tocaría y quien aporta 59 mil pesos, 200 caballos y una cabeza de ganado”, agregó.
Sin embargo, en la población aún se desconoce por qué no se atribuyó al municipio su participación en la Ruta Libertadora.
“No sabemos por qué le cambian el rumbo por el lado de Sácama, y por qué nos dejan por fuera a nosotros; aquí ya tenemos una trocha que va hasta Morcote, son 15 kilómetros; de Morcote a Paya 14 km, y de Paya a Pisba dos kilómetros, pero requieren mejoramiento”, dijo Agustín Albarracín.
Esta posición la respaldan tanto las autoridades municipales (en cabeza del Alcalde, Norberto Martínez) como los dirigentes y líderes, Jacobo Rivera y Amílcar Bohórquez, a nombre de un amplio sector de ciudadanos.
El cronista y periodista Miguel Arango Devia, dice que se ha diseñado un logotipo, distintivo de un grupo de ciudadanos de Nunchía, quienes reclaman del Gobierno Nacional un tratamiento acorde con el protagonismo de la región en la gesta libertadora.
Consideran los ciudadanos de Nunchía, que con bombos y platillos se anunció la firma del contrato para la ampliación, construcción de obras de arte y pavimentación de la carretera Ruta Libertadora, pero lo que realmente ocurrió, es que se ordenaron estas obras entre Duitama, Socha, Sácama, San Salvador entre los departamentos de Boyacá y Casanare.
Ratifican que la verdadera Ruta cubre los municipios de Tame (Arauca); Hato Corozal, Paz de Ariporo, Pore, Tamara y Nunchía en Casanare, y Morcote, Paya y Pisba en Boyacá que no se tiene en cuenta en las obras contratadas.
La Asamblea Departamental de Casanare, sesionará el 23 de junio en Nunchía, donde se aspira a producir un documento que recoja el inconformismo del pueblo llanero para el trato discriminatorio que por siglos el Gobierno central ha mantenido con los pueblos libertarios de América.
