Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

EL “CARNEO” UN DELITO QUE CONTINÚA EN “VOZ BAJA” EN CASANARE SIN ACCIÓN DE AUTORIDADES

Ayúdanos a compartir la noticia

El sacrificio ilegal y clandestino de ganado en las fincas de sus propietarios, infame modalidad de abigeato conocida como “carneo”, continúa azotando al departamento sin que exista una estrategia efectiva de las autoridades para enfrentar el fenómeno.

La técnica delictiva consiste en la incursión de cuadrillas de delincuentes a las fincas, quienes luego de seleccionar uno o incluso varios animales, proceden a su sacrificio, el aprovechamiento de las presas de carne, abandonando en el sitio cabezas, patas y las vísceras de los animales.

La cadena del abigeato se complementa con el sistema de transporte de las reses sacrificadas, a veces en motos, en vehículos particulares, camionetas, moto-carros, e incluso taxis que se utilizan para el propósito ilícito de llevar la carne a locales comerciales que la venden ilegalmente o se mercadea en restaurantes y asaderos de Yopal y algunos municipios.

CARNEO EN LA GUAFILLA (YOPAL)

En Maní, por ejemplo, el fenómeno de “carneo” está bastante extendido pero la denuncia es poca.

Algunas versiones extraoficiales, indican que en dicho municipio una poderosa estructura criminal comenzó a dominar el negocio y además de afectar a los finqueros con la muerte de sus animales, los amenaza, exigiendo no denunciar los casos ante las autoridades.

Y es que realmente, la rentabilidad de esta actividad ilegal es bastante atractivo, con un kilo de carne que alcanza un promedio de 20 a 22 mil pesos en el mercado local del producto, robar un animal y mercadearlo de forma ilegal puede dejar un gran margen de ganancia.

Hace pocos días una familia de finqueros residente en La Guafilla (a pocos kilómetros de Yopal) denunció que se vio afectada por actos de “carneo”.

“En la mañana llegamos a uno de los potreros donde tenemos el ganado y nos llevamos la sorpresa al encontrar los restos de uno de los semovientes, eran como las cinco de la mañana a la finca y vimos tirada la cabeza y el ‘menudo’”, dijo el afectado.

Refirió que cerca al lugar no hay casas cercanas, por tal motivo nadie supo ni vio nada.

Aunque fue su primer caso como afectados, dijo que habían escuchado de otros dos episodios en este mismo sector de La Guafilla.

“Pusimos el caso a disposición de la policía y ellos dijeron que iban a ‘investigar’”, agregó.

En el norte de Casanare, concretamente en Paz de Ariporo, donde también se registran constantes manifestaciones de este delito, el descaro de los “carneros” llega al extremo de convertir sectores semiurbanos del municipio en botaderos de los desperdicios de su actividad criminal.

“Habitantes vecinos del sector El Tesoro hacen un llamado a las autoridades para que hagan seguimiento y se investigue para determinar quiénes son las personas que arrojan desperdicios de ganado sobre la callejuela que comunica con la vía a El Totumo, frente a la entrada del Merecure”, consigna el portal de noticias pautonoticias.com.

Según los ciudadanos esta problemática es en un punto donde constantemente arrojan estos restos que se presume sean de animales robados.

PUBLICIDAD

ENVÍANOS TUS INQUIETUDES, TU OPINIÓN ES MUY IMPORTANTE

CONTENIDO RELACIONADO