El ataque sicarial que el pasado domingo dejó dos jóvenes muertos y uno gravemente herido, fue un ajusticiamiento ordenado por las disidencias del Frente 28 de las FARC, como una acción de «limpieza social» y control de grupos de delincuencia común.
Así lo informó mediante comunicado de prensa allegado a varios medios, la comandancia de dicha estructura subversiva que ha comenzado a imponer la ley en el norte de Casanare.
El cruento ataque cobró la vida de Roberth Darío Sepúlveda Parra (de 20 años), el Gemelo; y de Jhoan Sebastián Tarache «el Tarachito» (de 17); así como también dejó gravemente herido al hermano gemelo de la primera víctima: Roberth Julián Sepúlveda Parra.
Según el documento de la subversión, «ante la inoperancia del Estado se dio la orden de ejecutar esta orden para enfrentar la delincuencia desatada en los municipios de Casanare».
La guerrilla advirtió que seguirá ejecutando este tipo de acciones.
La afirmación del grupo ilegal resultaría altamente probable, a juzgar por las declaraciones que entregó a www.elnuevooriente.com el comandante del GAULA Militar de Casanare, mayor Nixon Salamanca, quien dijo que es muy posible que la recientemente capturada Otilia María Martínez, alias «la Cajera», tenga algún tipo de relación con el hecho.
«Esta mujer, vinculada a una serie de hechos delictivos como extorsiones y homicidios al servicio del Frente 28 disidencias FARC, pudo tener relación con estos homicidios», dijo el oficial.
Este medio tuvo conocimiento de otras hipotesis alrededor de estos hechos que indicarían que se habrían concertado de manera previa, situación que debido a la gravedad de la denuncia nos abstenemos de revelar hasta no tener la prueba contundente de dicha eventual situación.
