Un oscuro caso de agresión y acceso sexual contra una niña de 9 años, que ocurriera en Villanueva entre los años 2012 y 2013 y en el que participaron dos sujetos (padre e hijo), de nacionalidad venezolana, aprovechando su cercanía con los padres de la menor afectada.
Los hechos se remontan a dicha época, cuando NEISAR COCINERO NINCO y su padre, Carlos Julio Cocinero Pabón, aprovechaban que tenían en arrendamiento una habitación en la casa donde la niña vivía con sus padres para aprovecharse de la soledad de la menor a la que iniciaron atacando con tocamientos de índole sexual.
De manera insólita, aunque la situación fue descubierta y los sujetos fueron encausados judicialmente, en el caso del padre, errores de procedimiento judicial en el manejo del caso, terminaron con que al depravado se le otorgó una libertad y anulación del juicio, por decisión de la Corte Suprema de Justicia, en decisión de casación de fallo.
EL CASO DEL HIJO VIOLADOR
En cuanto al caso de NEISAR COCINERO NINCO, él fue mucho más allá que su abusador padre, y además de los tocamientos a la niña, al menos en dos ocasiones accedió carnalmente a su víctima.
En este caso, al parecer sí fue correcto el manejo judicial y según la Fiscalía, gracias a las pruebas presentadas por la Fiscalía en la Seccional Casanare permitieron que un juez de conocimiento condenara a 14 años de prisión a este sujeto como responsable del delito de acceso carnal abusivo con menor de 14 años.
Junto a su padre, el agresor sexual ocupaba una de las habitaciones de la casa en que además de él y la familia de la víctima, residían varias
personas más.
Las pruebas aportadas por el ente acusador demostraron que Cocinero Ninco aprovechaba que los padres de la menor salían a trabajar para someterla a múltiples vejámenes sexuales.
El sentenciado fue inhabilitado para ejercer derechos y funciones públicas por el mismo término de la pena de prisión, y le fue negado cualquier beneficio.