Con una inversión cercana a los $30 millones, la Subred Integrada de Servicios de Salud Sur es la primera institución pública del país en adquirir dispositivos de última tecnología para el tratamiento de pacientes con síndrome de dificultad respiratoria aguda a causa de la Covid-19.
En el Hospital El Tunal ya se encuentran los 12 cascos nuevos que disminuyen el uso de respiradores mecánicos, beneficiando la recuperación y salud del paciente, así como la seguridad del personal médico y asistencial que maneja este tipo de pacientes.
Se trata de un método de ventilación “no invasiva” que no requiere sedación, el paciente se mantiene lúcido y en contacto con sus familiares mientras se recupera.
“Los primeros pacientes tratados con estos equipos ya se recuperaron y, lo mejor, evitando ser intubados para respiración mecánica, procedimiento que siempre resulta traumático por sus riesgos de laceraciones, infecciones y largos tiempos de sedación, que producen desmejora en su estado físico y, en ocasiones, su rehabilitación resulta ser mucho más compleja que la misma enfermedad”, dijo el profesional de la salud, Jhon Edison Parra, coordinador de la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital El Tunal, en Bogotá.
Los dispositivos son similares a unos cascos de astronauta o de buzo, transparentes y permiten inyectar el oxígeno con una presión superior, lo que genera un efecto benéfico en los alvéolos pulmonares, que en muchos casos colapsan por el efecto de la COVID-19.
“Una gran ventaja es que, por su forma, tienen protección contra la generación de ‘aerosoles’, protege al personal asistencial y a otros pacientes. Esta herramienta disminuye el tiempo de estancia hospitalaria, de relajación muscular, y la recuperación resulta ser mucho más rápida”, agregó Parra.
Aclaró que “esta opción terapéutica no es para todos los pacientes, se deben seleccionar de acuerdo a la mecánica respiratoria, el estado de conciencia y la colaboración que ofrezcan con el tratamiento, se ha demostrado que el uso de este dispositivo disminuye el uso de los ventiladores, que se usan para casos más graves”.
Los cascos, que se adquirieron mediante un convenio docencia-servicio con la universidad Manuela Beltrán, permiten estar a la vanguardia en atención de pacientes afectados por Covid-19 u otras enfermedades respiratorias.
Con el propósito de aumentar y mejorar la respuesta a la atención de pacientes durante el segundo pico de la pandemia, en el Tunal se instaló un hospital de campaña que beneficiará a la población del sur de Bogotá.
El Secretario de Salud de la capital del país, Alejandro Gómez, dijo por su parte que aunque el sistema atraviesa un momento difícil, el sábado 16 de enero se ubicaron 133 pacientes en unidades de cuidados intensivos (UCI) lo que demuestra que la ciudad aún cuenta con disponibilidad de camas.