Nuestro país es este; Colombia. El que nos tocó, donde nacimos y hemos crecido.
Tal vez si no estás de acuerdo con la realidad, la que vemos cada día por las noticias, en los diálogos, en los corrillos y en si por todos lados viviendo el día a día en esta Colombia que no quiere levantar cabeza, nuestra actitud debe ser diferente.
Si tu decisión es la violencia, el vandalismo, el resentimiento y la radicalización, te pido el favor que te vayas del país, busca un horizonte mejor en otro lugar que te ofrezca la oportunidad. Seguramente si tienes la energía para destruir la institucionalidad, para lanzar piedras y bombas a los bienes públicos podrás tener la energía de triunfar y encontrar tu realización en otro país.
Por favor vete, ¡tengo hijos de tu edad que aun sueñan con ayudar a construir un mejor país, a realizar proyectos de vida y a trabajar por vencer la inequidad que es tan gigante en nuestro país.
Demuestra lo valiente que eres largándote, pero no le destruyas ni des mal ejemplo a millones de jóvenes que quieren a su país, que se son la gran mayoría.
Pides educación y quemas las aulas, las manchas con grafitis, pides transporte y quemas los buses de servicio “publico”, pides salud y atacas a tu prójimo hasta el punto de atentar con su vida. Pides seguridad pero irrespetas con tu rebeldía a la autoridad.
Vamos amigo, lárgate o reflexiona si el país que sueñas lo construyes lanzando piedras o colocándolas.
Por:Juan Bernardo Serrano