Dos sujetos que minutos antes de su captura habían despojado de 800 mil pesos a un incauto anciano, cayeron en poder de la Policía y luego de su trámite de judicialización, fueron enviados a prisión, ante el cual aceptaron cargos por diversos delitos.
Los individuos eran expertos timadores mediante la modalidad de «cambiazo de tarjetas» y fueron interceptados por la Policía minutos después de este, su último delito.
Las autoridades los identificaron como Tito Culma Varón y Edison Augusto Ferraro Maya.
«Los Tarjeteros» aceptaron sus culpas luego de la contundente presentación de pruebas de la Fiscalía ante el Juez que conoció del caso; entre el acervo documental, el ente acusador aportó informes de seguridad de las entidades bancarias con vídeos, testimonios y quejas de clientes que dan cuenta de la participación de los malhechores en por lo menos 30 acciones delictivas tipo «cambiazo».
Según la investigación, Culma y Ferraro actuaban así: «llegaban a los cajeros, uno de ellos ingresaba primero y con un líquido pegante bloqueaba e inutilizaba los teclados de los aparatos y luego esperaban pacientemente el ingreso de algún usuario que al tener los problemas de marcación o manipulación del aparato pedía ayuda.
Por supuesto, en ese instante aparecían los «solidarios» ladrones que ofrecían ayuda, tomaban la tarjeta bancaria y con mucha agilidad la cambiaban por un plástico parecido (portaban decenas de todas las entidades bancarias) y fingían varias veces hacer el retiro hasta obtener el número de la clave secreta de la víctima.
Luego, desaparecian del sitio llevándose la información de claves de acceso y la tarjeta original de la víctima a la cual habían engañado.
Al momento de la captura, «los Tarjeteros» portaban 69 tarjetas débito y crédito reportadas como hurtadas, dos celulares y 800 mil pesos en efectivo, al parecer de propiedad de quien denunció los hechos.
La Fiscalía presentó a los individuos ante el Juzgado Promiscuo Municipal con función de control de garantías de Samacá (Boyacá) el cual les imputó los delitos de hurto a través de medios informáticos y semejantes, daño informático, obstaculización ilegítima de sistemas informáticos, y violación de datos personales.
Los procesados aceptaron los cargos y les fue incautado un vehículo, al cual le fue afectado con medidas cautelares con fines de comiso.
Las autoridades renovaron a los usuarios de tarjetas débito y crédito en cajeros automáticos en todo el país, recomendaciones de inspeccionar de manera cuidadosa el estado de teclados y ranuras de dichos elementos y verificar que no tengan elementos extraños, así como ocultar con sus manos el momento del marcaje de las claves debido a que los delincuentes también instalan cámaras y elementos electrónicos para apropiarse de claves y otros datos de los tarjetahabientes para materializar fraudes bancarios.
