Los mandatarios departamentales enviaron una carta al presidente Gustavo Petro. Estas son sus nueve peticiones.
En una carta dirigida al presidente Gustavo Petro, 22 de los 32 gobernadores de Colombia expresaron su profunda preocupación por la grave crisis que atraviesa el sector arrocero del país.
En el documento, los gobernadores solicitan al Gobierno Nacional la adopción de nueve medidas urgentes para rescatar al sector arrocero y garantizar su sostenibilidad a largo plazo.
Entre las propuestas está la creación de un fondo de estabilización de precios.
César Ortiz Zorro, gobernador de Casanare y uno de los líderes de esta iniciativa, es el precursor de esta última propuesta: el Fondo de Estabilización de precios para el arroz paddy mediante decreto presidencial, que sería una respuesta de base a las dificultades que sufre el sector. El gobernador había radicado este proyecto de ley en el Congreso de la República durante su periodo como representante a la por Casanare.
Estas son las peticiones de los gobernadores al Gobierno
Reactivar el incentivo al almacenamiento como herramienta de solución inmediata para los productores de cara a la cosecha 2025.
Crear vía decreto presidencial, el Fondo de Estabilización de precios para el arroz paddy, garantizando que el valor de la carga llegue a los precios requeridos, contemplando no solo la recuperación de costos sino la motivación de generación de valor agregado a la economía campesina local de su producción. Se sugiere un mínimo de $220.000 por carga.
Fortalecer el sector agropecuario a través de la inyección de presupuesto al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural para crear y financiar los fondos de fomento agropecuario, los fondos de estabilización de precios, los incentivos financieros, entre otros.
Fortalecer los instrumentos y/o productor del portafolio financiero ofrecido al sector arrocero, creando líneas de crédito flexibles, con plazos convenientes (mínimo a 12 meses, dando lugar a la venta oportuna de la cosecha conforme a los mejores momentos de demanda), modificando la clasificación de los agricultores ante la Comisión de Crédito, especialmente en las líneas de crédito e incentivos Finagro, para que independiente del área sembrada todos los arroceros puedan acceder a incentivos y tasas especiales.
Incluir dentro de la oferta de crédito, la financiación para el desarrollo y mejora de la infraestructura de almacenamiento y secamiento de arroz, con el ánimo de regular el precio del producto en los momentos de taco de la cosecha (línea Finagro).
Velar por mantener, ampliar y proteger la producción nacional, a través del control de importación e imposición de aranceles a productos de origen extranjero, contemplando el aumento en los aranceles temporales o salvaguardas a la importación de arroz, con el propósito de evitar la quiebra del sector arrocero local y con ella el deterioro de la seguridad nacional, causal de excepción consagrada en el artículo XXI del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT por sus siglas en inglés) de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Revisar los Tratados de Libre Comercio (TLC) vigentes para garantizar que dichos acuerdos no perjudiquen la producción nacional, a causa del cambio drástico en las condiciones durante las negociaciones y las condiciones actuales del mercado. Se sugiere reexaminar especialmente el acuerdo de la Comunidad Andina (CAN), con más de 50 años de suscripción, y aplicar salvaguardas para los acuerdos vigentes con Ecuador y Perú.
Intervenir el oligopolio de la industria molinera, como medida para controlar el precio del arroz e impedir la especulación que afecta directamente el costo de producción y el margen de utilidad por hectárea.
Priorizar el mejoramiento y mantenimiento vial en los principales corredores de tránsito agropecuario, con especial énfasis en las vías estratégicas para el arroz.
La carta, firmada por 22 gobernadores de diferentes regiones del país, concluye con un llamado al Gobierno Nacional para que proteja la producción nacional y salvaguarde el trabajo de los campesinos y agricultores: «Es nuestra responsabilidad darle al campo y a las manos que lo labran el valor que se merece«.
