Una nueva denuncia ciudadana sobre la proliferación de distribuidores de estupefacientes en el sector del barrio Progreso-3, exteriorizaron vecinos del sector cansados con el actuar de al menos una veintena de personas dedicadas a esta labor, de las cuales hay al menos cuatro plenamente identificadas.
«Ellos son expendedores de drogas prácticamente a horas del día y hasta altas horas de la noche…», dice la denuncia.
Según el informante comunitario, los sujetos, hombres y mujeres tanto jóvenes colombianos como venezolanos, permanecen tomando, fumando y vendiendo drogas, frente a lo cual la gente de la comunidad está cansada.
«Es urgente y se requiere la instalación de cámaras y sistemas de vigilanecia, de esos que tanto han prometido nuestros gobiernos porque no es suficiente con el trabajo de la policía… las patrullas o cuadrantes pasan, realizan las requisas y esa gente ‘se guarda’ un rato… luego vuelven y siguen con la misma recocha y desorden incluso toda la noche, interrunpiendo el sueño con las personas que tienen que madrugar a trabajar», consigna la denuncia.
Los vecinos también advierten el riesgo sobre la población infantil, pues recuerdan la cercanía a estos sitios de permanencia de estos sujetos de las instalaciones del Megacolegio de Los Progresos, donde miles de estudiantes se ven sometidos a esta situación.
El riesgo se acrecienta para la comunidad porque a veces estas personas tienen enfrentamientos por disputas territoriales, donde se profieren amenazas y se amenazan con enfrentamiento y agresiones por estar peleándose el territorio para los actos ilícitos.
Entre los sujetos señalados se cuentan quienes aparecen en las fotografías, ante lo cual se pide mayor contundencia de las autoridades.
