El pasado 9 de noviembre, se confirmó la pérdida de 23 reses en producción, luego de una nueva incursión de delincuentes.
Las perdidas superan los 100 millones de pesos para los propietarios de la Hacienda Sabanales de donde se perdieron los animales, además del riesgo a la salud pública, pues en manos de delincuentes son sacrificadas sin la higiene necesaria, al tiempo que también son negociadas en el bajo mundo manteniéndolas a escondidas y sin la vacunación y el cuidado necesario.
Lo anterior termina afectando entonces no solo al propietario, sino también a toda la sociedad en general que un momento dado pudiera ingerir carne de animal sacrificado sin las condiciones necesarias que lo mantenga a salvo de cualquier enfermedad.
La empresa ganadera de donde fueron hurtadas los animales, está ubicada en la vereda Remolinos, jurisdicción del municipio de Orocué, Casanare.
Este robo deja perdidas inmediatas por más de $160 millones, impactando negativamente la economía y patrimonio de los propietarios.
Según la denuncia de Fedegán, los bovinos fueron sacados por una finca vecina y, posteriormente embarcados en varios camiones.
Desde Fedegán alertaron a todos los ganaderos y frigoríficos de la región para que se abstengan de comprar ganado de dudosa procedencia y evitar así no solo sanciones penales y administrativas, sino también, la ruina total de una familia.
Finalmente solicitaron a las autoridades competentes aplicar la extinción de derecho de dominio a los vehículos, que como en este caso, son utilizados para el transporte de animales producto del delito de abigeato.