La clínica adeuda a más 10 especialistas una suma superior a los 500 millones de pesos, de cuentas de cobro por servicios prestados, que datan del año 2018.
En el año 2020, por medio del Centro De Conciliación De La Cámara De Comercio, se realizó una audiencia de conciliación en la que la CLINICA MEDICENTER se comprometía a realizar pagos mensuales del valor total adeudado, acuerdo que fue incumplido por la Clínica.
Este incumplimiento llevó a que se presentaran acciones legales que terminaron con embargos al centro asistencial y el inminente riesgo que esto conlleva para los pacientes, todo por la falta de responsabilidad de los directivos de la clínica en cumplir con los acuerdos de la conciliación.
Sumado a esto, la “Red De Veedurías Ciudadanas Del Casanare” interpuso el pasado 12 de noviembre un acción de tutela, con el argumento de que “el embargo a las unidades quirúrgicas ubicadas en el predio secuestrado pone en riesgo la salud pública”, olvidando la veedora, María Magdalena Rodríguez, que existía un acuerdo firmado para los pagos de las deudas por los servicios profesionales pendientes y que fue la clínica quien incumplió, por otro lado hay que señalar que la Clínica Medicenter, es una “Prestadora De Servicios De Salud De Carácter Privado” y desconoce que el embargo obedece a un “pleito entre particulares” y no ante una entidad del sistema público de salud.
Por otro, la veedora aduce en su escrito que en el proceso de embargo se hizo “de manera irregular”, sin dar ninguna evidencia de las irregularidades que de manera temeraria señala, lo que deja la preocupación de que la veeduría este actuando en favor de la clínica y no de la garantía de prestación del servicio de los pacientes y usuarios y mucho menos de los profesionales que por años han prestado sus servicios, incluyendo el periodo de la pandemia, donde le personal medico fue clave para salvar vidas, aun a costo del riesgo propio.
Incluso, a la fecha, tanto a los profesionales de la salud, como personal de planta de oficios varios, que en la actualidad laboran para la Clínica Medicenter han manifestado que les adeudan hasta cuatro meses de pago.
Lo que resulta extraño es que la veeduría no haya indagado la situación y presente una acción de tutela que va en contravía de su función, pretendiendo suspender con ella una orden judicial que se dio en un proceso ejecutivo.
Y aun mas curioso resulta que la acción de tutela interpuesta por la “Red De Veedurías Ciudadanas Del Casanare”, se dé después de que el Honorable Tribunal superior de Casanare haya negado por improcedente la acción de tutela que interpuso la misma Clínica Medicenter Ficubo SAS por violación al debido proceso, y en donde los hechos son similares a los que hoy utiliza la veeduría, lo que denota que la veeduría se extralimitó y en lugar de velar por el buen manejo de la clínica a los dineros que percibe, esta a favor del no pago de las obligaciones a su personal.