Horarios laborales hasta de 12 horas, arriesgando la vida a cargo de jóvenes infractores de la ley penal con delitos tan graves como homicidios, lesiones personales o hurtos agravados; honorarios apenas superiores a un salario mínimo; mala alimentación; trabajo de fin de semana; falta de auxilio de transporte y riesgos de agresión y amenazas…
Ese es el panorama que enfrentan los educadores contratados por el ICBF a través de operador para el manejo del CAE Kairos, sitio de reclusión de menores de edad condenados por delitos graves y donde incluso permanecen algunos adultos que no han sido trasladados a centro penitenciario.
«Se ofrece un salario de $1.700.000 del cual descuentan al menos $377 mil para toda la carga de parafiscales y aportes a cargo del trabajador… se trata de un contrato de ‘prestación’ sin garantías ni de salud ni de prestaciones donde se exigen 12 horas diarias», consigna una denuncia anónima sobre el drama laboral de estos trabajadores.
Los profesionales exponen no solo salud mental sino su integridad física pues son blanco de amenazas constantes, agresiones verbales y hasta físicas, pues los internos habilitan armas con trozos de madera, metal o simplemente con objetos contundentes con los cuales algunos han recibido golpes.
CORPOFE, la entidad a cargo del enganche se escuda en que se trata de «condiciones que exige el ICBF… que pide 60 horas laborales y otorga dos días a la semana de descanso pero nunca un fin de semana, ofrecen una comida pésima y no hay auxilio de transporte».
Y es que el caso de las amenazas no es una mentira.
En las últimas cinco semanas se han presentado en el sitio, ubicado a unos 8 kilómetros de Yopal por la vía a Sirivana, al menos tres intentos de revuelta, varias agresiones y dos fugas, una de ellas el 7 de agosto y otra el 23, donde huibo también quemas de elementos, incendios y destrucción de mobiliario.
En el centro Kairos más de una veintena de jóvenes, incluso hasta los 20 años de edad (aunque se trata de un sitio para menores de 18 años), purgan condenas por conductas como homicidios, lesiones personales, hurtos en diversa modalidad y otras infracciones y violaciones a la ley.
