Un drama viven los familiares de Diego Enrique Valles Indriago, de 25 años de edad, quien desde el pasado 21 de noviembre salió de su residencia ubicada en uno de los barrios de Yopal, dejó una nota de voz avisando que volvería al siguiente día, sin embargo aún no conocen de su paradero.
Según lo que narro Maria Valles, (hermana) el joven es natural de Estado Zulia, Maracaibo, en Venezuela y desde el 2017 se había radicado en la capital casanareña, no tenía novia ni mucho menos hijos, tampoco tomaba, fumaba ni consumía drogas, por el contrario era muy trabajador, se desempeñaba lavando vehículos y lo último que conocieron es que al parecer se habría trasladado el pasado mes de noviembre hasta la ciudad de Bogotá presuntamente a reclamar un dinero, con la promesa de volver al día siguiente.
“Ese día yo fui a su habitación, revise, él no se llevó nada, ni ropa, ni cargador del teléfono, ni cepillo de dientes, lo único fue su ropa de trabajo que tenía ese día puesto, una gorra color gris, una camisa manga larga negra, un pantalón negro oscuro y unas botas plásticas… salió a las seis de la mañana al trabajo y sobre las tres y media me envió un audio donde decía que iba para Bogotá a reclamar un dinero que le debían y que regresaba al día siguiente” comentó la mujer.
Hasta ahora la familia no ha recibido ningún tipo de respuesta, desconocen si alguien le debía dinero, no han recibido amenazas o llamadas extrañas y aunque el caso ya ha sido puesto ante policía y fiscalía, piden haya mayor celeridad y los responsables de su desaparición aparezcan.
“Ya fui a los hospitales, a los terminales, a la morgue, medicina legal y mi hermano no aparece, busque por Bogotá y tampoco, yo ya testifique al igual que otras personas en donde al parecer estuvo por última vez, sé que hay algo extraño, pero aún no puedo implicar o señalar hasta dar con la persona, hasta poder tener las pruebas necesarias, porque hasta ahora parece como si se hubiera esfumado del planeta” dijo Maria Valles.
