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Luz Mila Barrera es la madre de Sonia Lucía Díaz Barrera, una joven de solo 30 años y quién fue asesinada en su residencia el pasado 2 de septiembre.
La muerte de la madre y empresaria, se descubrió cuando personas que se acercaron a averiguar la razón de su ausencia en su habitual sitio de trabajo, llegaron a su casa y al ver la puerta entreabierta, ingresaron al lugar y hallaron su cuerpo sin vida sobre las sábanas de su cama.
Según indicó Luz Mila Barrera, se cumplen dos meses y seis después de la pérdida aún no tiene respuestas de la investigación, «no sabemos nada, en ninguna parte nos dan razón, solo que esperar, incluso no se ni a qué hora murió mi hija porque no tengo dictamen médico» dijo.
Tanto para ella, como para sus otros hijos, o incluso para la hija de Sonia, ha sido difícil afrontar la situación.
«Yo tengo a mi niña, ella es el remplazo de mi hija, es como si volviera a nacer y volver a criarla, pero ella está afectada, la tengo con tratamiento porque no duerme en las noches, grita y patalea”, dijo con desolación la señora Barrera.
También comentó que ninguna autoridad se ha acercado para preguntar ¿Cómo está? ¿Qué necesita? Solo el bienestar familiar, «no he tenido apoyo, no he recibido nada, ni para sacar las citas médicas porque me toca llevarme a la niña y hacer fila en Capresoca…a ella la he llevado tres veces a tratamiento».
A la fecha, los familiares de Sonia Barrera, reconocida comerciante y a quién hoy recuerdan como una joven trabajadora, berraca, y quién trabajaba por y para su hija, dicen que continúan sospechando de la ex pareja y quién sería el padre de la menor.
«Es la única persona de quién sospechamos, por qué mi hija no tenía enemigos, ni otra persona, solo vivía con su hija y para ella… Él le pegaba en muchas ocasiones y muchas cosas más que lo sé porque mi hija me contaba, ella lloraba porque no la dejaba en paz, le mandaba audios groseros, era una persona enferma… El 10 de agosto tuvieron audiencia y ella contó todo, lo denunció, le pusieron medida de aseguramiento, pero la policía no le dio la protección» dijo con tristeza la mujer.
A propósito de la expareja sentimental y padre de la menor, el día del homicidio se informó que el hombre se presentó ante las autoridades en la Estación de Policía de Tauramena, sin embargo, autoridades aún no entregan información ni de la investigación, ni mucho menos de lo que sucedió con este hombre, quien a la fecha continúa llamando a la madre de Sonia, pidiendo ver a la niña.
Igualmente, según comentó esta madre y abuela, la menor continúa diciendo que su papá fue quien le hizo daño a su mamita, y aunque ha servido tal y como lo refirió la señora Barrera, como una luz en su vida y en los momentos difíciles, cuando aún en medio del recuerdo su nieta la sorprende llorando y le dice «no llores, mi mamita está en el cielo, con un vestido grande, y alas, y está en el corazón, pero mi papá si es malo» dijo Luz Mila al referir lo que ha vivido con su nieta.
Frente a ello, la familia espera recibir respuestas lo más pronto posible y que el responsable esté en prisión, así como mayor acompañamiento para su nieta «nadie sabe lo que sufre una madre, lo que uno vive, por eso le pido a mi Diosito que todo se esclarezca, porque uno se acuesta todos los días pensando en eso y se levanta igual, por eso el único psicólogo que yo he tenido es Dios».
