Estupor expresa la comunidad de Támara, zona cafetera de Casanare, al reportarse en las últimas horas la muerte, al parecer por suicidio, de la joven estudiante, Damaris Riscanevo Fuentes.
La jovencita de 16 años, estudiante de 11º grado, no había demostrado cambios de comportamiento o situaciones anormales en su actitud, que hicieran sospechar el triste desenlace que se dio por cuenta de la fatal decisión, cuyo motivo es desconocido.
Fue su propia progenitora quien encontró el cuerpo, suspendido de una cuerda y aunque realizó una maniobra rápida no fue posible salvar su vida pues ya se encontraba sin signos vitales.
“Es una situación inexplicable”, dijo el Alcalde local tamareño, quien precisamente tiene una política de asistencia y programas dirigidos a la niñez y la juventud, por lo que se mostró sorprendido por esta situación.
Damaris era hija de un labriego y una dependiente de almacén que están devastados con la noticia.
La familia es natural de la vereda Guaseque pero se encontraban radicados en el barrio Villanueva, parte alta del municipio, lugar donde se presentó la tragedia.
La muerte de esta menor se suma a los tres casos trágicos que enlutan a familias e involucran a menores de corta edad en Casanare: el sábado, un niño de 8 años murió accidentalmente en un caso de asfixia al atragantarse con una pepa de mamoncillo, en el sector de la invasión La Resistencia, en la capital casanareña.
El lunes anterior (26 de julio) un jovencito de 12 años, murió al ser atropellado de manera accidental cuando cayó desde el estribo lateral de una volqueta que conducía un primo suyo, en hechos ocurridos en la vía a la vereda Bellavista, en el sector de El Charte en Yopal.
Y ahora, el caso de Damaris, esta jovencita de 16 años que decide quitarse la vida.
