Ceca de 23 familias que tienen su residencia a unos cuantos metros de donde era la antigua planta de acueducto hace más de 10 años, en la vereda Buena Vista Baja, del corregimiento Alcaraván la Niata, no solo sufren por falta de agua, luz y vías, sino que se quejan por el botadero de basura en que se convirtió este terreno.
Según Maria Empera Rincón, presidenta del corregimiento, se han dejado una serie de llantas que no solo genera mal aspecto sino atrae animales e infecciones para la comunidad “trajeron una cantidad de llantas que ya no sirven para nada, un anidadero de culebras y ratones; tras de que esta toda una escoria y nos trajeron eso” ella, quien además manifiesta que no hay alguien que realice un control de acceso al lugar dice que los tienen totalmente abandonados.
El gran número de llantas en las que se da acumulación de agua procedente de la lluvia y la cual se estanca allí, atrae a los mosquitos y roedores que transmiten enfermedades perjudicando a la sociedad.
Según el Ministerio de Salud, los mosquitos “ponen sus huevos en depósitos de agua limpia como albercas, floreros de plantas acuáticas, llantas, baldes de agua y cualquier recipiente que está a la intemperie y que puede almacenar agua” los cuales, provocan dengue, “una enfermedad viral aguda que puede afectar a personas de cualquier edad, especialmente niños y adultos mayores, causada por un virus transmitido a través de la picadura de mosquitos infectados (Aedes aegypti)” indicó el ministerio.
Al respecto, el Gerente de la EAAAY reconoció que habían depositado estos elementos allí debido a que no tenían en donde más disponerlas luego de que ciudadanos inconscientes las arrojaran en diversos puntos de la ciudad.
“Vamos a buscar una forma de enviarlas a un sitio donde se les haga un manejo adecuado y ante las quejas de la comunidad, pues decirles que estamos planeando qué hacer con esa infraestructura abandonada”, dijo Jairo Bossuet Pérez Barrera.